Gastos energéticos que podríamos reducir fácilmente en nuestro hogar

Hoy queremos mostraros como cambiando pequeños detalles en nuestro día a día podríamos llegar a ahorrar hasta un 40% en nuestra factura de la luz.

El consumo de las viviendas en España equivale al 30% del consumo total del país. De media una familia española consume 4.000 kWh  y por cada uno de esos kWh se emiten unos 500gr de CO2, razón por la que reducir nuestro consumo no solo nos ayudará a pagar menos en la factura de la luz, sino que además estaremos contribuyendo a frenar el cambio climático.

Para empezar, aprovechemos y saquemos el máximo rendimiento a la luz natural, para ello debemos elegir las estancias más luminosas como zonas de estar, evitando así permanecer con la luz encendida gran parte del día.

La iluminación sin duda es otro de los factores clave, se recomienda no sobre iluminar una habitación y que las bombillas que se usen sean LED. Las luces LED se amortizan en menos de un año y duran mucho más que una bombilla convencional.

Un alto porcentaje de nuestra factura proviene de los electrodomésticos por lo que aquí son varias las medidas a tomar, empezando por poner el lavavajillas y lavadora con la carga completa, evitando abrir y cerrar la nevera en repetidas ocasiones, tapando la olla a la hora de guisar, apagar el horno 5 minutos antes y dejar aprovechar el calor residual, dejando apagado todo aquello que no estemos usando, planchando toda la ropa de una tirada y por supuesto apostando por aparatos A++ o A+++.

Controla también el termostato de tu hogar, para ello, ventila tu casa entre 10 o 15 minutos de máximo y mantén una temperatura de entre 17ºC – 21ºC en invierno y 24ºC – 27ºC en verano.

Por último, habla con tu asesor energético y optimiza su potencia, ya que la potencia es un fijo que pagamos cada mes y en función de nuestra demanda de consumo variará nuestro contrato. Bajarse la potencia supone un importante ahorro en su recibo.