Rebaja en los peajes de los puntos públicos de recarga, un impulso para la expansión del coche eléctrico

Hasta ahora, los costes fijos para la instalación de un punto público de recarga de coche eléctrico dificultaban la amortización del mismo. El coste del término de potencia era tan elevado, que el número de recargas no llegaba a asegurar una amortización de la instalación.

Esta barrera a la instalación de puntos de carga ha limitado la proliferación del vehículo eléctrico a pesar de suponer una apuesta por parte de las administraciones.

Asociaciones y empresas instaladoras demandan desde hace tiempo una rebaja en el tipo impositivo del término fijo de potencia para facilitar este tipo de infraestructura, marcada por una limitación que frenaba su crecimiento.

En este sentido, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el organismo encargado de armonizar los intereses de consumidores y empresas, aprobó en enero de este año una nueva metodología para el cálculo de los peajes de transporte y distribución de la electricidad que afecta directamente a este sector.

Efectos de los cambios en la factura de la luz en los puntos públicos de recarga

La nueva metodología afecta de forma directa y positiva a los puntos públicos de recarga.

A partir de ahora será más barato la instalación de una estación o punto de recarga rápida ya que el peso del término fijo se verá rebajado llegando a un máximo del 20% mientras que el 80% de la factura corresponderá al consumo.

En consecuencia, esta reducción de los costes fijos incidirá de forma directa en la expansión de puntos de recarga de coche electrico en España

Principales aspectos del cálculo de los peajes

En la disposición segunda de la circular se recogen todos los detalles que afectan a los peajes de transporte y distribución aplicables a los puntos de recarga de vehículos eléctricos de acceso público. Veamos punto por punto las condiciones y detalles de la nueva metodología.

• Primera condición: acreditar que el punto de suministro será de uso exclusivo para vehículos eléctricos y que el punto será de acceso público.
• Segunda condición: será aplicable a aquellos puntos de suministro en redes de tensión inferior a 30kV y con potencia contratada superior a los 15kW.
• Tercera condición: los peajes afectados son el peaje 3.0 TDVE y el peaje 6.1TDVE.
• Cuarta condición: forma de determinar los peajes para la recarga de coche eléctrico.
  • Término de potencia: se harán de forma que recupere el 20% de la facturación por peajes de transporte y distribución de los correspondientes peajes de acceso establecidos en el artículo 6.2.
  • Término de energía: se harán de forma que recupere el 80% de la facturación por peajes de transporte y distribución de los correspondientes peajes de acceso establecidos en el artículo 6.2.

• Quinta condición: si se detecta que la estación de suministro no es exclusiva para la recarga de vehículos de acceso público, se realizará una penalización del 20%.
• Sexta condición: la aplicación de este peaje se producirá en el período regulatorio que va del 2020 a 2025.

Como ejemplo, antes de la nueva normativa, una instalación de un punto de carga pública con un término fijo de potencia de 200 kW costaba alrededor de 20.000€/año.

Esto, unido a las trabas burocráticas estaban limitando la puesta en marcha de estaciones. Desde enero, la nueva normativa supone un alivio para el sector que tendrá sus efectos positivos en el crecimiento de puntos donde poder recargar el coche eléctrico en España.